El mundo del entrenamiento fitness nos vendió la idea que la única o la mejor forma de utilizar la grasa como fuente de energía es haciendo entrenamiento cardiovascular. La teoría nos dice que la grasa comienza a oxidarse o a utilizarse luego de 30 minutos de entrenamiento aeróbico continuo. Pero utilizar la grasa no depende solamente del entrenamiento cardiovascular, depende también de cómo esté dispuesto hormonalmente tu cuerpo y de tus capacidades físicas como la fuerza y la velocidad.
La utilización de métodos con pesas, permite llevar al cuerpo a tener la necesidad de utilizar la grasa como fuente de energía. Esto no quiere decir que el entrenamiento cardiovascular no se deba hacer o que no sea importante hacerlo, solo hay que saber cuándo hacerlo y en qué momento de la sesión del entrenamiento. Generalmente se recomienda hacerlo al final de la sesión de pesas porque en ese momento del entrenamiento ya has logrado utilizar los carbohidratos y las proteínas necesarias, dejando así la oxidación de la grasa al entrenamiento cardiovascular.
Mi recomendación es hacer circuitos de aceleración metabólica donde puedas combinar ejercicios básicos de movilidad y ejercicios donde intervengan grupos musculares grandes como las piernas, el glúteo, el abdomen, el pecho y la espada; de esta manera lograrás captar más oxígeno y generar más gasto calórico, permitiendo así utilizar la grasa como fuente de energía.
Es importante tener en cuenta las intensidades que se puedan manejar en estos circuitos, y es acá donde entra a jugar un papel fundamental: la frecuencia cardiaca (pulso) y el nivel de entrenamiento que tenga la persona, ya que estas dos darán la pauta al entrenador de dar los rangos en que debe estar la frecuencia cardiaca y los tiempos de recuperación para no dejar caer el pulso y se pierda el estímulo que necesita el cuerpo para cumplir el objetivo de oxidar grasa.
Pero utilizar la grasa no depende solamente del entrenamiento cardiovascular, o del entrenamiento con pesas, también depende de cómo esté dispuesto y funcionando tu sistema endocrino: la insulina que es la encargada de regular el azúcar en tu cuerpo y el cortisol que es la encargada de controlar los niveles de estrés.
Estas dos hormonas solo se pueden regular de una manera natural que es la alimentación, siendo ésta el factor más importante para disponer el cuerpo a la utilización de la grasa y mediante la buena utilización de los métodos cardiovasculares y así se podrá optimizar el resultado.
Con Juanes Coach podrás lograr a través de una buena alimentación y con un buen método de entrenamiento quemar la grasa que necesitas bajar para estar en buenas condiciones.